Aranceles al mundo: Trump sacude el tablero económico internacional
El pasado miércoles, Donald Trump anunció nuevos aranceles a las importaciones de todos los países, con tasas que oscilan entre un mínimo del 10% y un máximo del 54%. Entre los más afectados se encuentran China (54%), Vietnam (46%), India (26%) y la Unión Europea (20%).
Estos anuncios provocaron una fuerte reacción en los mercados. El índice S&P 500 cayó un 4,8% el jueves y un 6% el viernes, marcando sus peores descensos diarios desde 2020 y registrando su peor semana desde mediados de 2022. Los mercados europeos también sufrieron importantes caídas, de magnitud similar.
Durante los últimos 100 años, EE.UU. ha reducido sistemáticamente los aranceles a las importaciones, un factor que ha contribuido al crecimiento de su economía. Durante el primer mandato de Trump, aunque el arancel promedio se incrementó ligeramente, su guerra comercial estuvo principalmente enfocada en China y tuvo un impacto más limitado.
¿Por qué han sido tan negativos estos anuncios?
Muchas empresas estadounidenses fabrican sus productos en países como China, India o Vietnam y luego los venden en EE.UU. Estos nuevos impuestos, especialmente los de mayor magnitud, impactan directamente en esas empresas, que deberán subir sus precios de venta o aceptar una reducción significativa de sus márgenes de ganancia, o bien recurrir a una combinación de ambas medidas.
Aunque el impacto aún es incierto, se estima que estos aranceles podrían aumentar la inflación en EE.UU. entre un 1,5% y un 3%. Es posible que, en respuesta, algunas empresas trasladen sus centros de producción a otros países para minimizar el impacto o incluso regresen parte de la manufactura a EE.UU. Sin embargo, la incertidumbre en torno a estos cambios dificulta prever con exactitud el impacto inflacionario. En cualquier caso, es muy probable que los precios de los bienes aumenten y que el crecimiento económico futuro se vea afectado.
Otro factor negativo es la posible represalia de los países afectados, que podrían imponer aranceles a productos estadounidenses en respuesta. Esto podría intensificar la guerra comercial, reduciendo el comercio internacional y limitando los beneficios que este genera para la economía.
¿Hay algo positivo?
Resulta difícil encontrar aspectos positivos en el aumento de aranceles o en una escalada de la guerra comercial. Sin embargo, existen algunos factores que podrían mitigar el impacto. A pesar de los anuncios iniciales, aún es posible que se alcancen acuerdos con ciertos países para reducir los aranceles efectivos con relación a los niveles anunciados.
Además, dentro del paquete de políticas económicas de Trump, hasta ahora se han implementado las medidas económicas más perjudiciales. Aún queda por ver la aplicación de otras políticas, como la desregulación y las reducciones impositivas, que podrían generar efectos positivos en el crecimiento económico.
Por otro lado, en medio de la volatilidad generada por la noticia, las tasas de interés de los bonos del gobierno estadounidense han descendido. Esto ha permitido que los rendimientos positivos de los bonos de buena calidad compensen en parte las pérdidas en el mercado accionario. Una menor tasa de interés también reduce el costo de financiamiento del gobierno, lo que podría contribuir a mejorar su déficit fiscal.
AGUSTIN QUEIJO